Gran parte de los usuarios creen que, al igual que con los disipadores de procesador, hay que desmontar la tarjeta gráfica para reemplazar su “pasta térmica” cada ciertos meses, pero lo cierto es que no es tan así.

Igualmente, sobre esta temática existen distintas posturas de expertos o leyendas urbanas, por eso están los que sostienen que no es necesario hacerlo nunca, y los que sí consideran que es fundamental para realizar una correcta reparación de ordenadores, al menos una vez al año. 

Por este motivo, las “tarjetas gráficas” modernas cuentan con una GPU que genera una gran cantidad de calor, por lo que equipan un disipador con ventiladores para ofrecer refrigeración activa y evitar el sobrecalentamiento. 

Además, la transferencia de calor entre la GPU y el disipador requiere del uso de pasta térmica para asegurar una máxima eficiencia. Ahora, nos preguntamos ¿es necesario reemplazar la pasta térmica de la tarjeta gráfica con la misma frecuencia que la CPU?

No te arriesgues: cuida tu garantía.

Muchos expertos en informática señalan que es un mito cambiar la “pasta térmica” de la tarjeta gráfica una vez al año. 

Como verán, en España, la mayoría de los productos poseen una garantía de 2 años, pero si usted decide por algún motivo manipular la tarjeta gráfica para realizar una correcta reparación del ordenador, empleando pasta térmica, deberá saber que automáticamente perderá el derecho de garantía y, por lo tanto, no tendrá oportunidad de reclamar si el dispositivo se daña durante ese período. 

Por lo tanto, antes de realizar cualquier reparación, es fundamental verificar si la tarjeta gráfica aún está cubierta por la garantía (vale la pena señalar que algunas tarjetas tienen una garantía de 3 o incluso 5 años, en lugar de los 2 años estándar).

¿Qué sucede si la temperatura de la tarjeta gráfica ha estado aumentando gradualmente pero todavía está en garantía? 

Si se ha observado un aumento en la temperatura de la tarjeta gráfica, es posible que sea necesario reemplazar la pasta térmica, pero no se recomienda hacerlo mientras aún esté cubierta por la garantía. 

Asimismo, se puede realizar una limpieza externa de la tarjeta gráfica sin desmontarla, y si el aumento de la temperatura se convierte en un problema, entonces es conveniente aprovechar la garantía y contactar al fabricante.

En resumen, la idea de «cambiar la pasta térmica de la tarjeta gráfica una vez al año» es un mito que debe ser ignorado, ya que puede resultar en la pérdida de la garantía del producto. Po ende, si usted percibe un incremento de la temperatura de la tarjeta gráfica de su ordenador durante el período de garantía, será fundamental que se contacte con el fabricante para realizar una reparación de ordenadores adecuada.

¡No más confusiones! Cada cuánto cambiar la pasta térmica.

En el ámbito de la reparación de ordenadores, es cierto que la pasta térmica que viene de fábrica en las tarjetas gráficas no siempre es la mejor calidad, y a veces ni siquiera se aplica de forma óptima. Por este motivo, si usted cree que su tarjeta gráfica ya no está en garantía y nota que la temperatura de funcionamiento es excesiva, esto es un indicador de que es necesario cambiar la pasta térmica. 

Pero, ¿cada cuánto tiempo es necesario hacerlo? Según expertos en la materia, no hay un periodo de tiempo estipulado para realizarlo, ya esto depende de varios factores, entre ellos: el fabricante, la calidad de la pasta que se haya usado, el tiempo de uso, la humedad ambiental y la temperatura normal de funcionamiento de la gráfica. 

Por consiguiente, en cualquier caso, siempre es importante mantener la tarjeta limpia y libre de polvo, y jamás abrirla para cambiar la pasta térmica a menos que se observe un problema de temperatura significativo. La degradación de la pasta térmica es un riesgo real con el paso del tiempo y el exceso de temperatura, pero no se puede saber si está en mal estado hasta que se abra la tarjeta.

¡Optimiza tu GPU con la pasta térmica adecuada!

En cuanto a las pastas térmicas para tarjetas gráficas, cabe destacar que no existe una específica para este propósito, ya que su funcionamiento es bastante similar al de los procesadores y sus disipadores. Por lo tanto, cualquier buena pasta térmica para CPU será igualmente adecuada para la GPU. 

No obstante, desde “reparación de ordenadores”, aconsejamos utilizar pastas más espesas que, aunque son más complicadas de aplicar, se degradan menos con el paso del tiempo.

En cualquier caso, si estás buscando una recomendación específica, te sugerimos la nueva Arctic MX-6, que funciona a la perfección para este tipo de reparaciones de ordenadores y no resulta demasiado costosa.

(S.M.C)